Matthew Hotton abre el baúl de su herencia familiar y saca esta maravillosa canción basada en un canto compuesto por su padre, convirtiéndola en un poderoso himno de fe para la iglesia de hoy.
El video musical para el tema Cada día fue grabado en el templo de la Iglesia Presbiteriana San Andrés, localizado en Buenos Aires, Argentina. «La locación se eligió ya que primeramente es una hermoso templo», explica Matthew, «y segundo, queríamos que el lugar acompañara a este sentimiento de que estábamos haciendo una adoración “como los viejos tiempos”, pero trayéndola con un poco del estilo actual», añade.
Matthew Hotton grabó esta canción y su videoclip para honrar a su padre, a su familia y a la herencia de adoración que se encuentra en los himnos cristianos. Las imágenes muestran al cantante encabezando un grupo numeroso de personas de pie al frente del templo,—parte de su familia, en realidad, que incluyó a primos y a su abuela—, desde donde entonan este himno con la pasión y el amor que inspiran sus versos.
Hotton destaca el profesionalismo del equipo que hizo realidad este trabajo videográfico. En el set se encontraban alrededor de 70 personas, de las cuales, la mayor parte —un 95%, afirma él— nunca había participado en la grabación de un videoclip. «Gracias a Dios, todos supieron la importancia de esta producción y supieron ponerle la mejor onda, humor y por sobre todo, pudieron aguantarse casi siete horas de rodaje», concluye Matthew, quien agradece el trabajo de Lemuel Righi en la dirección, y a los miembros de su familia que lo acompañaron en esta producción.